La exhibición de Rubio en Artpace, El Carretón (The Cart), refleja su interés en la colaboración y el esfuerzo comunitario. Expandiéndose más allá de la vibrante y ondulante estética del artista, la instalación es la primera exploración en forma tridimensional de Rubio. Esta estilizada representación del barrio urbano refleja las personalidades de Rubio y sus colaboradores, así como también de los chicanos a lo largo del país.
El enfoque escultural de El Carretón, es un carrito del supermercado a gran escala y modificado. Creado junto con el artista metalúrgico local Luis Chispas Guerrero, la bulbosa forma parece derretirse en sus ruedas angulares. Esta representación fantástica explora las funciones alternativas de los carritos del supermercado en el ambiente urbano, como modo de transporte entre los supermercados y las casas para aquéllos sin vehículos, o una unidad móvil de almacenaje para aquéllos sin hogar. Al tratar el carrito como uno haría con un preciado vehículo.
Las curvilíneas firmas en la pared, pintadas por el artista del graffiti David “Shek” Vega de San Antonio, y acentuadas en brillante neón por la artista Cathy Cunningham, reflejan el cuidadoso estudio de Rubio sobre el color. Con su obra cargada de contornos gráficos, ellos representan tanto la belleza del arte callejero y la vitalidad del muralismo (un estilo de arte mural que se originó en México). Aquí, la característica del graffiti actúa como un indicador de la cultura urbana, insinuando los habitantes imaginados del entorno de Rubio.
El movimiento congelado de la placa de la pared es repetida en las curvas físicas de la estilizada cerca y taller de neumáticos de Rubio. Ubicada en el remoto extremo de la galería, una estriada estructura con brillantes rojo, amarillo y naranja que fue un esfuerzo en colaboración con el diseñador de escenarios Rudy Galindo, el edificio es reminiscente a los talleres de neumáticos propiedad de latinos, que se encuentran en las ciudades de Norteamérica. En el interior, un video-montaje compuesto con Manuel Soliz y Adriana García presenta imágenes de múltiples talleres de neumáticos del oeste de San Antonio.
El continuo audio que le acompaña y que fue compuesto por Phil Luna y Rubio combina ruidos del barrio con los sonidos de la ciudad durante la noche. Yuxtapone estruendosas bocinas de autobuses, las voces de niñitos, el traqueteo de las latas de aerosol, y perros ladrando, con música Dub, Tejana y de Conjunto, expresando la multiplicidad de la cultura chicana urbana.
El Carretón tararea con actividad: una colorida celebración de la vitalidad de las comunidades méxico-estadounidenses de la ciudad.
– Emily Morrison